WAKAMI · la rueda del tiempo: LA LUNA DE LAS HIERBAS

La Luna de las hierbas, de la cebada, del maíz, o también llamada Luna roja, es un tiempo de abundancia para la agricultura, y para el embarazo.

Este es el momento de recoger las hierbas mágicas y guardarlas para el invierno o compartirlas con otras personas.

Esta es una buena luna para la adquisición, la recogida y el almacenamiento.

Puede ser que sea un buen momento para ir a una promoción en el trabajo, para celebrar el éxito de un amigo, o simplemente para apreciar cómo este planeta nos colma de regalos una y otra vez.

CORRESPONDENCIAS

Espíritus de la Naturaleza: las dríadas.
Hierbas: manzanilla, hierba de San Juan, angélica, hinojo, ruda.
Colores: amarillo, oro.
Flores: girasol, caléndula.
Olores: incienso, heliotropo.
Piedras: Ojo de gato, cornalina, jaspe, ágata de fuego.
Árboles: castaños, alisos, cedros.
Deidades: Ganesha, Tot, Hator, Diana, Hécate, Nemesis.

LA INFLUENCIA MÁGICA

Flujo de energía: estamos en la energía en la cosecha, la recolección, y el aprecio. Es tiempo de vitalidad, salud, y amistades.

En esta época del año, es posible que desees hacer magia para ayudar a la cosecha de los beneficios de la abundancia de la Tierra. Es también un buen momento para hacer algún movimiento en el trabajo o en tu proyecto para que alcance una posición en el nivel de mayor esplendor o superior.

Aprovecha algunas de las energías ardientes de la Luna del maíz para tu ritual y tu trabajo con hechizos. Recuerda dar una ofrenda a la diosa por su generosidad.

Es el momento de cosechar lo que ahora se está manifestando, reconocerlo y ponerlo a disposición para un nuevo ciclo de abundancia; o como dicen en los negocios, ver en dónde, cómo o cuándo se va a reeinvertir.

Si es posible, sal a la calle para celebrar esta Luna llena!
Si bailar desnud@ alrededor de la hoguera está en contra de las costumbres o recomendaciones en tu vecindario, entonces con sólo sentarte al aire libre y disfrutar de la luz de la luna será suficiente, y puede ser un excelente momento para compartir con las amistades, y las compañeras de vida.

Quieres hacer algo más simple? Tal vez puedas hacer lo siguiente:

Enciende una vela blanca.

Levanta las manos hacia el cielo y si se puedes ver la Luna,

abrázala y siente cómo su luz te abraza a ti.
Si no la puedes ver directamente, visualízala.

Puedes decir en voz alta: "Diosa Madre, me presento ante ti, su hija __ (o hijo__). Yo soy una mujer que sigue los antiguos caminos de los ciclos de la naturaleza en un mundo nuevo.

Cada mes cuando la Luna está llena, así como mis antepasadas lo hicieron a través del tiempo, y las próximas generaciones lo harán hasta el final de los tiempos, celebro tu luz, tu plenitud y tu abundancia con alegría, agradecimiento y salud.
Doy gracias tu presencia en mi vida."